A NUESTROS QUERIDOS
HIJOS:
Les dimos la vida pero no podemos vivirla por
ustedes. Podemos enseñarles muchas cosas pero no podemos obligarles a aprender.
Hijos; podemos guiarles y dirigirles, pero no
responsabilizarnos de lo que hacen, podemos hablarles extensamente acerca de la RESPONSABILIDAD … Pero serán ustedes y únicamente ustedes los responsables
indiscutibles y totales de todos sus actos. Grábenselo muy bien su mente, solo
recuerden que en esta vida no hay premios ni castigos, solo CONSECUENCIAS.
Podemos instruirles sobre lo bueno y lo malo,
pero no podemos decidir por ustedes. Podemos enseñarles a compartir, pero no
podemos forzarles a hacerlo, eso es algo que únicamente la conciencia les podrá
dictar. Podemos hablarles del respeto y la consideración hacia los demás pero
no podemos pedírselo si no lo consideran importante, podemos darles amor pero
no podemos obligarles a aceptarlo ni a que lo den.
Si quieren ser respetados, sean respetuosos,
recuerden que el verdadero respeto no se impone; se inspira. Esa es una gran
verdad, no lo olviden. Podemos exhortarles a la necesidad de tener altas metas,
pero no podemos alcanzarlas por ustedes, podemos enseñarles acerca de la
bondad. Pero no podemos obligarles a ser bondadosos, podemos tratar de educarles
lo mejor que podamos, pero no podemos hacerlos educados.
Podemos aconsejarles sobre las buenas
amistades, pero no podemos escogérselas. Podemos recomendarle, pero no
garantizarle. También podemos hablarles acerca de la paz y la armonía pero debe
reinar entre ustedes y tus semejantes, pero eso es algo que ustedes deberán
establecer según sean aquellos con quienes convivas. Pero lo que si les podemos
asegurar es que… den siempre lo mejor de ustedes y recibirán lo mejor de los
demás.
¿Que mas les podemos decir? Podemos platicarles
acerca de la vida, pero no podemos edificarles una posición ni garantizarles el
triunfo. Podemos decirles que el licor es peligroso, pero no podemos decir “NO”
por ustedes. Podemos hablarles y educarles acerca del sexo pero no podemos
mantenerlos puros. Podemos amonestarlos en cuanto al pecado, pero no podemos
por eso hacerles una persona moral.
Podemos advertirles acerca de las drogas… pero
no podemos evitar que las usen. Créanos que para eso necesitaran una férrea y
determinante fuerza de voluntad. Podemos explicarles como vivir, pero no
podemos darles la vida eterna, pueden estar seguro de que nos hemos esforzado
hasta el máximo por darles lo mejor de nosotros… sencillamente porque los
amamos. Pero lo que hagan de sus vidas dependerá enteramente de ustedes.
Aún cuando siempre estuviéramos a su lado,
las decisiones las tomaran USTEDES. Solo le pedimos a Dios que los ilumine para
que tomen las correctas. La vida es el regalo que Dios les hace. La forma en
que vivan su viva es el regalo que se haces ustedes… y a Dios.
Que tengan una hermosa vida…
y que Dios los
bendiga y los guíe por cualquier camino que tomen…
¡Y POR DONDE QUIERA QUE VAYAN!
Con todo cariño
Sus padres.
